Un informe de Cepsa y Manpower vaticina el liderazgo de España en esta industria, generando 181.000 empleos hasta 2040 y 15.600 millones al PIB.
La industria de las moléculas verdes, como el hidrógeno verde o los biocombustibles, no sólo representa una gran oportunidad para impulsar la transición energética en Europa, sino que también supone un importante generador de empleo y, por tanto, de crecimiento económico, con un potencial para crear 1,7 millones de nuevos puestos de trabajo y un crecimiento del PIB europeo de 145.000 millones de euros hasta 2040, según un estudio realizado por Cepsa y ManpowerGroup.
Presentado en el marco del Foro Económico Mundial en Davos (Suiza), el informe ‘Las moléculas verdes: la inminente revolución del mercado del empleo en Europa’ es un estudio pionero que analiza por primera vez el impacto económico de las moléculas verdes en términos de generación de empleo.
En el caso de España, el documento anticipa que el país liderará en las próximas dos décadas la producción de hidrógeno verde y el crecimiento del empleo relacionado.
En concreto, el efecto tractor de la industria española vinculada a las moléculas verdes generará en el país más de 116.000 puestos de trabajo en esta década y 181.000 hasta 2040, que corresponden al 11% del empleo total generado en la UE y Reino Unido.
De esta manera, España estaría al frente del número de empleos generados vinculados a las moléculas verdes, por delante de países como Reino Unido (173.000), Alemania (145.000) o Francia (105.000).
En términos de crecimiento económico (PIB), el sector aportará 15.600 millones de euros adicionales hasta 2040, lo que supondría un incremento del 1% respecto al PIB del 2022.
España es el país donde los nuevos empleos requieren de más competencias vinculadas a la transición energética a 2040, con el 55% de las nuevas posiciones.
Asimismo, el estudio afirma que se reduce la brecha de género que existe en la actualidad en el sector energético, alcanzando el 37% de representación de mujeres en la industria de las moléculas verdes. Esto
se debe a un ritmo mayor de incorporación de mujeres, que duplicaría su incorporación al de los hombres entre 2030 y 2040, permitiendo que las mujeres ocupen el 51% de los nuevos empleos directos generados en combustibles renovables al final de la década de 2040.
Además, el documento valora el impacto tractor de economía de las moléculas verdes para toda la cadena de valor productiva, generando mucho más empleo y valor económico al resto de sectores e industrias que a la puramente energética.
De esta manera, el 88% de los 1,7 millones de nuevos empleos generados por el hidrógeno verde y los biocombustibles a 2040 surgen en el sector servicios y comercio, en el industrial, la construcción o la
educación; mientras que el 12% restante estará en el sector energético.
El informe también señala que la transición requiere de ‘upskilling’ y ‘reskilling’ del 60% de los profesionales en Europa para dotarlos de habilidades ‘green’ críticas. Así, países como Italia, Alemania y la propia España se enfrentan a las mayores brechas de habilidades que deben abordarse mediante la formación profesional, herramientas de mapeo de la población activa y sus capacidades y la colaboración público-privadas.
El consejero delegado de Cepsa, Maarten Wetselaar, destacó la apuesta de la compañía por «liderar esta revolución» a través de la propia transformación del grupo hacia una empresa de producción de moléculas verdes como el hidrógeno verde y los biocombustibles «para descarbonizar sectores como el transporte y la industria pesados».
Cepsa está desarrollando junto a sus socios el mayor hubs de moléculas verdes de Europa con el Valle Andaluz del Hidrógeno Verde y los proyectos de biocombustibles 2G que está impulsando en España, que suman una previsión de creación de hasta 14.000 empleos directos, indirectos e inducidos.
LA OPORTUNIDAD PARA ESPAÑA ES «MAYOR QUE EN NINGÚN OTRO LUGAR».
Así, durante una mesa redonda en Davos para presentar el estudio, el directivo puso en valor que la apuesta por las moléculas verdes representa una oportunidad para todo Europa, aunque en España consideró que «es mayor que en ningún otro lugar» por las posibilidades del país para impulsar las energías renovables, ya que cuenta con «sol, viento y terreno».
En este proceso de desarrollo de una industria como la del hidrógeno verde, consideró que «España obviamente también espera atraer industria nueva, porque, por supuesto, la industria tiende a ir a donde la energía es más barata», añadió.
Igualmente, Wetselaar aseguró que en la transición, las alianzas y la inclusividad «resultan fundamentales», por lo que añadió que la colaboración con ManpowerGroup representa «un siguiente paso esencial para impulsar la increíble oportunidad de creación de empleo que supone la transición energética».
«Nos permitirá canalizar conocimientos estratégicos basados en datos y transformarlos en programas específicos de ‘upskilling’, gestión y planificación de los perfiles necesarios e iniciativas de formación. Juntos podemos preparar a los profesionales con las habilidades que exigen los roles ‘green’ emergentes y hacer accesible la oportunidad para que sea inclusiva y empodere a miles de profesionales», dijo al respecto.
Por su parte, el consejero delegado de ManpowerGroup, Jonas Prising, afirmó que se está ante una nueva era que representa «una enorme oportunidad, no sólo para las empresas, sino para millones de profesionales». «Sin embargo, sólo se podrá aprovechar si preparamos a las personas para ello. El futuro del trabajo es verde y tenemos
que trabajar juntos para garantizar el futuro del planeta y sus habitantes», advirtió.
DEMANDA DE PROFESIONALES TÉCNICOS.
El informe también apunta como crece la demanda de profesionales técnicos, ya que sólo 20 ocupaciones copan 8 de cada 10 nuevos empleos generados, siendo fundamentalmente puestos técnicos de nivel medio y superior.
Por ello, hasta 2040 crecerá la demanda de científicos e ingenieros de nivel medio y alto, electricistas, directores de administración y comerciales, peones de minería y construcción, profesionales IT y operarios de metalurgia y maquinaria.
Igualmente, el estudio afirma que los profesionales que quieran aprovechar uno de los nuevos empleos que se crearán, deberán estar formados en alguna o varias de las competencias necesarias para desempeñar estas ocupaciones.
EUROPA PRESS