La producción de vehículos en España crece casi un 20% en el primer trimestre, hasta 658.282 unidades.

Las plantas de producción de automóviles instaladas en España fabricaron 658.282 unidades (entre turismos y vehículos comerciales e industriales) en el primer trimestre de 2023, lo cual supone un incremento interanual del 19,6%, mientras que en marzo se ensamblaron 237.318 ejemplares, un 30,8% más que en el mismo mes de 2022, según los datos de la Asociación Española de Fabricantes de Automóviles y Camiones (Anfac).

«El crecimiento se produce gracias a los progresivos alivios en los cuellos de botella de los primeros meses del año, a pesar de que todavía se registran problemas de aprovisionamiento intermitentes en las fábricas», ha valorado la organización en un comunicado.

A pesar de que la producción se incrementó en los tres primeros meses del año, la organización ha advertido de que las cifras siguen estando un 13% por debajo de las de 2019, año prepandemia.

«La industria de la automoción recupera cada vez más su volumen de producción, aunque continúan los paros intermitentes en la cadena de aprovisionamiento que a lo largo del año van a continuar marcando el ritmo de recuperación y pueden llegar a limitar la capacidad exportadora del sector. En este sentido, los fabricantes aprovechan los momentos en los que se aligeran los problemas de aprovisionamiento para impulsar la producción y hacer frente a la demanda embolsada», ha añadido Anfac.

Por tipo de vehículo, la fabricación de turismos y todoterrenos en el primer trimestre creció un 15,6% en comparación con el mismo periodo del curso anterior, hasta 512.304 unidades (+15,6%), mientras que en marzo el número de ejemplares ensamblados subió un 19,4% en relación con el mismo mes de 2022, hasta 182.547 unidades.

En tanto, la fabricación de vehículos comerciales e industriales entre enero y marzo se incrementó un 36,2% en tasa interanual (145.978 unidades), al tiempo que en marzo se ensamblaron 54.771 unidades, lo cual supone casi duplicar las cifras del mismo mes del ejercicio anterior (+91,9%).

Por fuentes de energía, en marzo se produjeron en las plantas españolas 41.820 vehículos de cero y bajas emisiones (vehículos 100% eléctricos, híbridos enchufables, híbridos convencionales, gas natural y gas licuado de petróleo), lo cual supone un aumento interanual del 81,2%.

Asimismo, el mes pasado se ensamblaron en las factorías nacionales un total de 138.459 vehículos de gasolina (+28,3% interanual) y 57.039 unidades diésel (+19,9%).

LA EXPORTACIÓN CRECE UN 25,1% EN EL TRIMESTRE

En cuanto a la exportación, el sector envió a otros países un total de 214.460 vehículos en marzo, lo cual supone un 39,8% más que en el mismo mes de 2022, mientras que las cifras del acumulado del primer trimestre se sitúan en 594.383 unidades, un 25,1% más en comparación con el mismo periodo del año anterior.

«El sector continúa haciendo frente a los problemas en el transporte que podrán limitar a lo largo del año la capacidad exportadora», ha recalcado Anfac.

Por destinos de la exportación de la producción española de vehículos en marzo, el 90,9% fue a Europa, con un «ligero descenso» de 1,6 puntos porcentuales en comparación con el mismo mes del año anterior.

En ese sentido, en el ‘top 5’ de destinos figuran Francia, Alemania, Italia, Reino Unido y Turquía. «Respecto a los principales mercados europeos, su paulatina recuperación respecto al año anterior tendrá un impacto positivo en la exportación de vehículos siempre que los niveles de producción lo permitan», ha explicado la organización.

El director general de Anfac, José Lópe-Tafall, ha destacado que las cifras de marzo mantienen la «tendencia al alza» y la recuperación de la producción, aunque ha insistido en que sigue por debajo de las cifras prepandemia.

«Continuamos puntualmente con problemas de aprovisionamiento en algunas fábricas que determinaran el ritmo en los próximos meses. A pesar de esta tendencia positiva, no podemos relajarnos, por ello desde Anfac seguimos insistiendo en que es necesario que tengamos, como país, una apuesta decidida por la movilidad sostenible y electrificada donde el vehículo ha de seguir teniendo un papel relevante tanto en el ámbito industrial como para la sociedad», ha opinado.

Sobre ello, ha resaltado la necesidad de acelerar el impulso de la electrificación y «despejar dudas» sobre el «camino a seguir» dado que normativas como el Euro 7, más exigentes en materia de emisiones, «no ayudan», según sus palabras.

«La transformación hacia la nueva movilidad supone un gran esfuerzo para los fabricantes y es necesario no desviar el foco en nuestros objetivos a 2035, con normativas como Euro 7 que suponen una mejora marginal, pero que pueden tener un impacto muy significativo en los vehículos fabricados en España, suponiendo un riesgo para nuestra industria, fábricas y empleo», ha agregado.

EUROPA PRESS